¿Sabías que una mala pisada puede provocar problemas futuros?

Si quieres asegurarte de que tu pisada está bien y quiere seguir practicando deporte de manera segura, infórmate  sobre nuestro procedimiento de estudio de la pisada. Es una forma sencilla de saber cómo andas y así en caso de algún problema tratarlo prematuramente.

El pie se puede comportar de manera diferente parado o en movimiento, a veces que un pie en estático presenta mucho arco, lo que nos podría indicar que es supinador, pero al analizarlo en movimiento el arco se “aplana” por lo que podría ser pronador.

El podólogo es el profesional especialista en el pie y a través de un detallada valoración de columna, caderas, rodilla y pie y hacer un estudio te puede decir que el tipo de pisada que tienes.

La podología deportiva es la disciplina que trata las diferentes afecciones de los pies de los deportistas con el objetivo de disminuir la presencia de posibles lesiones y optimizar el rendimiento deportivo para prevenir posibles lesiones.

¿Cómo detecto que tengo que hacerme plantillas?

Lo ideal sería que cuando empezamos a correr, nos hagamos diversas pruebas para comprobar si el deporte que vamos a hacer no perjudica nuestra salud, entre estas pruebas , se encuentra el estudio biomecánico. Pero lo normal es ver al corredor cuando tiene lesiones recurrentes que remiten cuando hacen reposo.

¿Cuáles son las lesiones más comunes cuando tenemos algún problema de pisada?

A pesar de que correr es quizá la forma más simple de hacer ejercicio, es altamente susceptible a lesiones. Sobre todo, entre los corredores novatos o experimentados. Todo aquel que ha estado corriendo durante un tiempo y muestra alguna variación en la pisada, lo más probable es que haya sufrido tendinitis/ tendinosis, fascitis plantar, periostitis tibial, contracturas, metatarsalgias, ampollas, etc. El 80% de las patologías asociadas a practicar running están relacionadas con una hiperpronacion no corregida.

¿Cuánto me duran unas plantillas?

La duración variará en función del material empleado, del peso del corredor y de los kilómetros que haga. Normalmente se revisan cada 12 meses.